Translate

jueves, noviembre 17

MARINA















La mar me suena dulce en los oídos
sus dedos acarician la mirada
van dibujando espumas, transparencias
que deshacen el sol entre la arena
La mar viene a mi noche en remolino
marea de palabra en las corrientes
sube y baja el ardor, la sal germina
en el jardín que es agua de los besos
La mar, raya ondeante del camino
La mar es más ardiente que la luna
La mar, sublimidad de la belleza
su tacto contradice mis esferas
los monstruos me despiertan, todo es agua
y soy pez en el aire de los sueños
El sol se hunde conmigo en el abismo
dormimos en la mar, somos poema
inconsciente, sensual, contemplativo
evoca movimiento en la distancia
y es el verso, toda la mar del mar...

©Julie Sopetrán

martes, noviembre 8

UN ADEMÁN INCONCRUENTE





Tiemblo
la taza se derrama en el traje impecable
de la noche.
Un ataque de pantomima
espanta las palomas dormidas del convento.

Entre los dedos
se desanima el gesto:
en la expresión del culto
que articula la audiencia.

Es una declaración de lo que se siente
o son ademanes defectuosos
que en la oscuridad saben a café con poesía.

Manifestación de sentimientos mudos
acentos afectados
en los virajes de los movimientos.

O tal vez es una mancha en las gafas
que no deja ver la mejilla
en los colores del impacto
o es el mar que me acerca las olas
pronunciando sabores.

Sí, sí, es el gesto de la luna
al pasar por la plaza
que sonríe misterios a las monjas.
O es acaso la sombra en el asombro
del insomnio.

Guiño, ilusión del respingo
garabato en garambaina
torcedura de gesto
o la voz deambulando en el silencio...

Y tú y yo
dando y recibiendo el provecho
que aprovecha la miel
de unos versos libres.


© Julie Sopetrán